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martes, 8 de noviembre de 2011

Tienes que confiar


Me ves pero sólo ves lo que yo siempre te he dejado ver, no puedo mostrarte cómo algo me hace daño, no quiero decirte que si que haces falta, tengo miedo a que una vez que dependa de alguien habré fallado y que tú no dudarás en dejarme caer, no quiero que me ayudes si puedo sola, tal vez me engañes, y no tendrás la culpa, la tendré yo por darte algo que es muy importante para mí. No sé decirte si puedes hacer algo para cambiarlo, podrías demostrarme que estarás ahí en el justo momento? Tengo heridas que me duelen y hay que saber tratarlas. ¿Eres médic@? Tal vez entonces podrías empezar por este corazón que bombea dolorosamente contra mi pecho. Es peligroso, no te daría miedo y te echarías atrás dejándome con el pecho abierto a la desventura y sangrando estúpidamente mientras mi corazón cree que puede seguir? Pierdo si no confío y me protejo? Déjame decirte que si, mis piernas pueden llevarme, mis manos conseguirme lo que quiero, mi mente darme la solución, pero mi alma se queda desnutrida en esa esquina, donde va desfalleciendo por falta de algo, algo que no he sabido darle, aunque lo tenga no es posible que la cure, necesito de otro que me dé ese amor que necesita, y si no me equivoco te ocurre lo mismo, entonces si somos la pareja perfecta hagamos un trato, te daré más del amor que pueda darte y a cambio sólo dame el necesario, el justo para pensar que estás ahí cuidándome.

No puedes confiar en todos, pero tampoco dejar de confiar en alguien

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