Que no me incordies tanto por favor!

En serio me siento fatal, odio mis inseguridades, intento evadirme de ellas y erradicarlas para que se piren de una vez por todas, pero siguen ahí. Me da rabia, si, porque la gente siempre te exige más de lo que puedes darles, siempre chupan tu energía para anestesiar sus dudas e infelicidad, casi como a veces siento que me gustaría estar, en el sentido de apoyarme en los demás. Estoy harta de tener que dar si quiero y si no quiero, porque aunque no quiera vivir apartada tampoco tengo que estar al frente de una situación de locos, mi teléfono nunca para de incordiarme una y otra vez, y cuando estoy mal ¿cuántas recibo? ¿Una o dos en las que es una simple formalidad en ciertos casos? Es que no ven que yo tampoco puedo con lo que se me viene encima, que no tengo siquiera para mí, para volver a levantar los párpados en la mañana, que hasta en sueños siento la presencia siempre insistente de mis torturas silenciosas, ¿qué pasaría si me desmoronara, y los papeles se intercambiaran, podrías tú satisfacer mis necesario sustento, sabes acaso? NO y NO LO HARÁS porque ni siquiera puedes, no puedo ni yo, así que hazme el favor y tira tú un rato de tu vida, yo no soy tu madre, para ser sincera estoy harta de preocuparme por idioteces como para también hacerme cargo de las tuyas...